Cuando pensamos en la gastronomía mexicana, uno de los platillos que siempre destaca es el taco al pastor. Con su carne jugosa, marinada en una mezcla de chiles y especias, cocinada lentamente en un trompo, es un verdadero deleite que ha conquistado paladares tanto dentro como fuera de México. Pero, ¿sabías que los tacos al pastor tienen una historia vinculada a la inmigración libanesa en México?
Los orígenes de los tacos al pastor
El taco al pastor tiene raíces que se remontan a principios del siglo XX, cuando un gran número de inmigrantes libaneses llegaron a México. Estos inmigrantes trajeron consigo sus tradiciones culinarias, entre las cuales destacaba el shawarma, una técnica de cocina en la que la carne se asa en un asador vertical. Esta forma de cocinar fue adoptada y modificada por los mexicanos, quienes comenzaron a usar carne de cerdo en lugar de cordero, y a marinarla en adobos típicos de la cocina mexicana, como achiote y chile guajillo.
Así nació el taco al pastor, un platillo que combina influencias de dos culturas diferentes pero que ha logrado establecerse como un ícono de la comida callejera en México. La carne, servida en pequeñas tortillas de maíz y acompañada de piña, cebolla, cilantro y salsas, se convirtió en uno de los platillos favoritos de los mexicanos.
El trompo, un elemento clave en los tacos al pastor
Uno de los elementos más distintivos de los tacos al pastor es el trompo, la estructura en la que se coloca la carne en forma de cono. Este método de cocción, inspirado en el shawarma libanés, permite que la carne se cocine lentamente, logrando una textura tierna y jugosa. A medida que se corta la carne, se obtiene una mezcla perfecta entre las partes crujientes y suaves, lo que le da al taco al pastor su característico sabor.
El uso de la piña es otro toque distintivo. Aunque algunos sostienen que la piña se añadió para darle un toque fresco y contrastar con el sabor especiado de la carne, otros dicen que fue una ocurrencia puramente visual para decorar el trompo. Sea cual sea la razón, la piña se ha convertido en un ingrediente esencial en la preparación de este delicioso taco.
Tacos al pastor: un platillo con reconocimiento mundial
A lo largo de los años, los tacos al pastor han ganado una popularidad inmensa no solo en México, sino a nivel internacional. En 2019, los tacos al pastor fueron reconocidos como el mejor platillo del mundo por Taste Atlas, una enciclopedia de comida que clasifica y reseña platos de todo el planeta.
Este reconocimiento no hace más que confirmar lo que todos los mexicanos ya sabían: los tacos al pastor son una verdadera joya de la gastronomía, que representa la mezcla perfecta entre tradición, sabor y cultura. Hoy en día, es imposible caminar por las calles de cualquier ciudad mexicana sin encontrar una taquería que sirva este manjar, desde pequeños puestos ambulantes hasta restaurantes de renombre.